Cuando nos enfrentamos a una grabación en ocasiones puede parecernos un mundo. A mi mismo me pasaba cuando comencé a estudiar Comunicación Audiovisual.
Cada vez que me ponía a grabar el resultado se alejaba demasiado de lo que había en mi cabeza. A mi compañeros de aventuras les pasaba algo similar. Pensábamos que era cuestión de falta de material.
Tener el mejor material del mundo no es suficiente. Incluso me atrevería a decir que no es necesario. Uno de los cortometrajes que más orgulloso estoy, lo grabamos con una cámara doméstica con miniDV y un focohalógeno de jardín encintado a una escoba. El resultado fue increible.
Para mi, fue mi primera experiencia profesional, por llamarlo de alguna manera. Entre los compañeros reunimos el material y con ello planteamos las escenas.
Te cuento qué pasos seguimos, para que puedas adaptarlos a tu proyecto:
Producción (Planificar la grabación)
Ya teníamos el guión y sabíamos qué queríamos. En otras palabras, ya teníamos el objetivo. Buscamos los actores, que por supuesto eran amigos nuestros que estaban acostumbrados a interpretar.
Entre todos los compañeros reunimos el material para grabar: cámara, cintas miniDV (ahora uso tarjetas SD), los focos, soportes, y una buena cinta americana que lo agarre todo…
¡Ah! y buscamos la localización.
Cuando teníamos todo agendamos una fecha de grabación , lo cual fue complejo porque teníamos que cuadrar a toso el equipo más de 10 personas con horarios muy diferentes. También buscamos otra de reserva por si se alargaba la jornada y lo teníamos que dejar a medias.
Grabación (rodaje en términos cineastas)
Esto fue un gran desmadre. No habíamos ensayado el guión, tan solo se lo habíamos pasado unos días antes. Se portaron bien y mientras unos compañeros montábamos el decorado, otros hicieron un repaso del guión.
Con todo montado hicimos unas pruebas de iluminación para ver que según el tiro de cámara se veía iluminada lo que queríamos. La grabación era en la misma sala, por lo que no nos llevó mucho tiempo.
Comenzamos la grabación y todo correcto. Hicimos los ajustes y falseos típicos de la producción audiovisual, y ahí acabó la jornada.
Edición del vídeo (corta y pega, une, borra, añade y quita…)
El grueso de esta parte se encargó principalmente un compañero. El nos selección de los brutos que habíamos grabado todos los materiales válidos según los apuntes de la script. Con ellos montó una primera versión.
Nos reunimos y visionamos el primer montaje, todo sin efectos ni etalonaje, ni nada, solo un importa ajusta y exporta. De aquí le indicamos qué echábamos en falta y que suprimiríamos.
Mientras se hacían la primera versión, creé la intro y los rótulos. Y se los pasé al compañero.
En la segunda edición, rótulos incluidos, ya era otra cosa. También había etalonado una parte del corto para ver el ambiente que le íbamos a dar. Tras esto se acabó el montaje con los últimos retoques.
Publicación
Organizamos en el salón de actos de la facultad la «Premiere» para todos los asistentes que quisieran venir y luego lo distribuimos mediante YouTube. Eran otros tiempos.
Hoy lo hubiésemos acompañado de promoción en redes sociales e incluso de alguna página web. Aquí ya está el límite de la imaginación y del presupuesto.
Espero que te haya sido útil la experiencia ¡Suerte con tu proyecto!